La alerta meteorológica se ha cumplido con crudeza este martes en La Rioja Baja. Alrededor de la una y media de la tarde, una violenta tromba de granizo ha descargado con fuerza sobre la zona comprendida entre El Villar de Arnedo y Tudelilla, dejando en pocos minutos un impresionante manto blanco sobre carreteras y campos, y causando notables daños.
Las consecuencias más severas se han cebado con el sector agrícola. Las viñas situadas en el paraje de La Gargantilla, dentro del término municipal de Ocón, han sido especialmente afectadas. El granizo ha arrancado numerosos pámpanos, muchos de los cuales ya portaban los incipientes racimos, lo que augura un impacto significativo en la cosecha de la zona.
Esta fuerte granizada se enmarca en una situación de inestabilidad atmosférica que afecta a gran parte de España, debida en gran medida a un persistente bloqueo anticiclónico sobre las islas británicas. La Rioja se encontraba hoy entre las once comunidades con aviso amarillo activado por tormentas y riesgo de granizo.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé que la inestabilidad continúe. De hecho, para este miércoles, La Rioja sigue bajo aviso amarillo por tormentas intensas. Se espera que el episodio tormentoso alcance su punto álgido en la Península entre el miércoles y el jueves, con la posibilidad de tormentas fuertes, localmente muy fuertes, y más granizo, debido a la influencia de un sistema de bajas presiones. El jueves persistirá la inestabilidad, con lluvias que podrían ser más intensas y acompañadas de tormenta por la tarde, especialmente en la mitad oriental peninsular.
Hacia el viernes, se anticipa un cambio de tendencia con la entrada de altas presiones, lo que debería traducirse en una progresiva estabilización del tiempo en La Rioja, con cielos despejándose, aunque no se descarta alguna inestabilidad residual con chubascos en zonas de interior.