Programa para el martes 9: Charanga, encierro, pelota y mucha marcha
El martes 9 de septiembre promete ser de los que se recuerdan con una sonrisa de oreja a oreja. Desde la mañana hasta que salga el sol, la fiesta no dará tregua.
Arrancaremos a las 11:00 h., con la charanga Wesyké desparramando alegría por las calles y calentando motores para lo que viene después. Porque a las 11:30 h. toca el tercer encierro, esta vez con reses de la ganadería Murillo Conde de Tauste (Zaragoza). Nervios, carreras y algún que otro “¡ay, madre mía!” estarán garantizados. Y ojo, porque mientras tanto, la peña La Pinchaita pondrá la guinda con una degustación para recuperar fuerzas entre carrerón y carrerón.
Después, a las 12:30 h., la plaza se viste de arena y fiesta con la prueba de reses bravas. Un momento para que los más valientes (o los más osados) disfruten de cerca del carácter de los animales.
La tarde no se queda corta. A las 18:00 h., el frontón municipal será el escenario de un partidazo de pelota mano por parejas: Prado - Cuairán contra Elizalde - Merino. Un choque de nivelazo que hará vibrar a los pelotazales.
Y claro, después de tanto esfuerzo, a las 19:30 h. toca refrescarse el gaznate con la degustación de zurracapote en la peña Oasis. Ese trago que sabe a fiesta y amistad.
Pero el martes no levanta el pie del acelerador: a las 20:00 h., otra vez la charanga Wesyké recorrerá las calles, porque si algo nos gusta en Igea es que no decaiga la música. Y a las 21:00 h., la plaza se convierte en pista de baile con el Dúo Estrella, que promete sacar a bailar hasta al más tímido con su repertorio variado.
La noche pinta larga. A las 00:00 h. arranca la Disco Las Vegas, que traerá temazos para todos los gustos. Cuando pare a las 01:30 h., la charanga Wesyké volverá a liarla con un recorrido nocturno de los que te dejan afónico de tanto cantar. Y, como guinda final, a las 02:00 h., segunda tanda de la Disco Las Vegas, para que nadie se quede con ganas de fiesta.
Martes de música, toros, pelota, charanga, zurracopote y mucha, mucha diversión. O como se dice en Igea: un martes como Dios manda.
