​Mil días de igealarioja.com. Cuando un pueblo se convierte en diario

Un diario nacido en el pueblo y para el pueblo
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Mil días dan para muchas cosas: para cambiar de trabajo, para aprender un idioma… o para levantar, casi desde cero, un diario digital que ha puesto a Igea en la pantalla del móvil de medio mundo. Eso es lo que ha hecho igealarioja.com, el “Igea Entre Todos”, un periódico independiente que ha decidido contar solo lo que pasa en Igea y su entorno, sin despistarse con grandes titulares nacionales, pero con la misma seriedad que un gran medio. 


Aerea Igea


Un diario pegado al kilómetro cero

Desde 2023, IGEA ENTRE TODOS se marcó una misión clara: informar sin opinar (Para eso estáis vosotros)  de lo que ocurre en el pueblo y alrededores, explicarlo con calma, darle contexto y hacerlo con ética periodística: rigor, independencia y responsabilidad. Vamos, contar la verdad de lo que pasa en Igea, aunque duela un poco a veces, y hacerlo pensando primero en los vecinos. 

La web se ha ido llenando de secciones que ya son familiares: noticias de política local, deporte y ocio, reportajes sobre igeanos, paleontología, naturaleza, cultura, fiestas, galerías y hasta recetas para chuparse los dedos. Es, literalmente, el pueblo ordenado por pestañas: lo mismo encuentras la crónica del último pleno que un artículo sobre encierros, la Marcha contra el cáncer o la historia de un olivo colosal en La Cabezuela.


De la plaza a la pantalla: Igea en modo global

En estos 1.000 días el diario ha logrado algo que no sale en las estadísticas oficiales, pero se nota, ha fidelizado a los vecinos. No solo a quienes siguen cruzándose cada día en la plaza Pedro María Sanz Alonso, sino también a los igeanos que viven en Logroño, Zaragoza, Madrid, Barcelona… o a un montón de descendientes que miran Igea desde Alemania, Reino Unido o América con un café en la mano y la web abierta.


La audiencia ha ido subiendo poco a poco, sin prisas pero sin pausa, con picos de hasta 240.000 visualizaciones mensuales de páginas en épocas fuertes como las Fiestas, cuando medio pueblo se busca en las galerías y en los vídeos resumen, y con temas puntuales que han superado las 60.000 visitas sumando la web, el canal de YouTubeFacebook y las redes de Instagram  @igea85, como ha ocurrido con alguna crónica de Plenos especialmente movidos. 

Porque igealarioja.com no vive solo en la web, se apoya en un canal de YouTube muy activo y en redes sociales donde se comparten reels de encierros, resúmenes de fiestas, vídeos nostálgicos en blanco y negro y clips que mezclan historia, humor y mucha tierra. El resultado es sencillo: si pasa algo en Igea, lo normal es que antes o después aparezca por ahí. 


Revista


Del papel al píxel… y vuelta

El proyecto no se ha quedado solo en la pantalla. Muy pronto apareció también la versión impresa de “IGEA Entre Todos”, esa revista en papel que se repartía en bares y comercios del pueblo, a modo de resumen de lo más importante del último trimestre. Una especie de “hemeroteca de andar por casa” que mezclaba la cercanía del bar con el archivo ordenado de la web.

A todo esto se han ido sumando encuestas sobre la vida del pueblo, convirtiendo el diario en una pequeña plaza pública donde opinar también cuenta. 


Mil días contando Igea

En apenas 1.000 días, igealarioja.com ha narrado Fiestas, carreras entre dinosaurios, jornadas micológicas, marchas solidarias, nevadas, incendios, plenos tensos, historias de igeanos anónimos, hallazgos paleontológicos y recuerdos de un pueblo en blanco y negro que vuelve a moverse gracias a la tecnología. 

Todo eso con una idea muy simple detrás, que Igea tenga su propio espejo diario, hecho desde dentro y para los de dentro, pero abierto a cualquiera que quiera asomarse. Un espejo donde caben la crítica y el cariño, las buenas noticias y las que duelen, siempre con el pueblo como protagonista.


Mil días después, la sensación es clara, Igea tiene ya su propio diario y si estos 1.000 días han dado para tanto, casi da vértigo pensar lo que se podrá contar en los próximos mil. Mientras tanto, que no falten fotos, vídeos, encierros, fiestas… y, sobre todo, ganas de seguir leyendo y escribiendo Igea entre todos.


Gracias a nuestros colaboradores, Pedro, Mariapy, Peter... y gracias a vosotros, lectores, por vuestra fidelidad.


Ricard Fadrique

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