El oficio y la afición lo lleva en los genes. Fermín Marzo Martínez (Igea 1955), 'el Esquila', como le conocen en IGEA, ha pasado 50 años, de los 78 que ahora tiene esquilando ovejas y burros. Sus antepasados llegaron desde Teruel esquilando ganado de pueblo en pueblo hasta topar con IGEA. Aquí, el abuelo de Fermín conoció a una lugareña y ya se quedó a vivir. Las sucesivas generaciones heredaron el oficio, incluido el hijo de Fermín quién empezó a esquilar muy joven. 'Un fuera de serie' explica orgulloso 'El esquila'. mientras nos hacía una demostración de cómo esquilar un burro enano propiedad de su amigo el cabreo 'Sote'.
Desde chaval soñaba con esquilar. Desde que cumplió los 17 años, este igeano se levantaba a las 5 y, si tenía que desplazarse lejos, a las 4 de la madrugada para afilar las herramientas antes de ir a esquilar. 'Cuando aparecieron las máquinas, entre cuatro cinco que éramos, esquilábamos entre 800 a 1000 ovejas todos los dias en La Ribera y por las Bardenas y teníamos que afilar entre 25 y 50 maquinillas antes de ir a esquilar'. A las ovejas se les daba un corte al año. A los burros tres así que 'Dependiendo del estado del ganado si no llevabas la herramienta bien afilada, no se trabajaba a gusto y no se rendia bien', explicó.
Ahora Fermín se entretiene en sus campos de cultivo y asegura melancólico haber sido 'muy feliz. Yo soñaba con esquilar' explicó.