El viernes 12, Día de la Mujer en las Fiestas Patronales de Igea 2025, no solo fue de charangas, pasacalles y alegría femenina: también fue un día de doblete taurino. ¡Sí, señor... o señora! Dos encierros en la misma jornada, con las reses de Merino Garde de Marcilla (Navarra) como protagonistas.
La mañana arrancó con cierto suspense. El quinto encierro, previsto para las 11:30 h., se hizo de rogar un cuarto de hora más. Y claro, entre el murmullo del público, los nervios de los corredores y el calorcito que ya apretaba al sol, la espera se hizo larga. Pero cuando las reses salieron, la calle se llenó de adrenalina: carreras y gritos. Tras la carrera, la cita siguió en la plaza con la prueba de reses bravas, donde los más valientes se arrimaron un poquito más a los astados, siempre con el respetuoso miedo que impone la bravura.
Por la tarde, a las 18:00 h., llegó el sexto encierro de las fiestas. Y aunque algunos pensaban que tras la comida y el buen vino no quedarían fuerzas, Igea demostró que aquí la fiesta no se apaga tan fácil. Los corredores volvieron a la calle, las reses hicieron su trabajo y el público disfrutó de otro rato de emoción y sustos bien medidos.
El Día de la Mujer dejó claro que en Igea se corre, se ríe y se vive a lo grande. Dos encierros en un día, con sabor navarro y alma riojana.