Receta de Judías Blancas con Níscalos

Las judías blancas y los níscalos son dos ingredientes que, cuando se combinan, no solo crean un plato delicioso, sino que también aportan numerosos beneficios para la salud. 

Las judías blancas son ricas en proteínas, tienen un alto contenido en fibra, bajas en grasa y con muchas vitaminas y Minerales.

Por su parte los níscalos, también conocidos como "rovellones", son setas que aportan un sabor único a los platos. Te ayudan a mantener una buena salud ósea y a depurar el organismo, combatiendo, así, la retención de líquidos. Además  son  bajos en calorías, ricos en antioxidantes y son una  fuente de vitaminas y minerales. 

Hoy te ofrezco una receta para disfrutar de este exquisito plato.

Ingredientes:

• Judías blancas
• Níscalos
• Zanahoria
• Puerro
• Cebollas
• Ajos
• Tomate
• Pimiento verde
• Pimiento rojo
• Vino blanco
• Pimentón
• AOVE, sal y pimienta

Preparación:

1. Pondremos las judías blancas a remojo 12 horas antes.
2. En una cazuela colocamos las judías blancas y cubrimos con agua, añadimos media cebolla, la zanahoria, el puerro, los ajos y el laurel. Cocemos hasta que estén tiernas.
3. Limpiamos los níscalos y desechamos los que no estén firmes, los troceamos y reservamos.
4. Picamos la cebolla y los pimientos, y los ponemos en una sartén con un poco de aceite. Pelamos el tomate y lo troceamos.
5. Añadimos una pizca de pimentón a la sartén e inmediatamente incorporamos el tomate y hacemos un sofrito con el conjunto.
6. Agregamos los níscalos reservados, salpimentamos y salteamos unos minutos, vertemos el vino blanco y dejamos evaporar.
7. Diez minutos antes de que las judías estén en su punto, sacamos las verduras, excepto el laurel, y las trituramos, volcamos el puré que obtengamos sobre las judías y también el sofrito de verduras y setas.
8. Dejamos que se integren bien todos los ingredientes durante diez minutos y servimos bien calientes.